El Junior negó que haya estado inmerso en las drogas y que solo estuvo consumiendo las mismas pastillas que Óscar Valdez.
Julio César Chávez Junior está de nueva cuenta en el ojo del huracán. Y es que el pugilista, quien está alistando su regreso a los cuadriláteros para este 18 de diciembre ante Davis Zegarra, dio a conocer que sí estuvo en una clínica de rehabilitación hace unos meses y fue porque su esposa, Frida Muñoz, lo llevó a internar.
Sin embargo, explicó que una vez en la clínica su pareja se desentendió de él y no le permitió a ver a sus hijos, al tiempo que explicó que no estaba inmerso en problemas de drogas como para ser internado, debido a que solo estaba consumiendo unas pastillas para adelgazar, que incluso afirmó eran las mismas que le arrojaron el positivo a Óscar Valdez hace unos meses.
«Duré tres meses y medio sin ver a mi hijo porque estaba en la clínica de (rehabilitación), porque la mamá de ellos (sus hijos) me metió para que estuviera bien, pero yo nada más tomaba unas pastillas que eran para bajar de peso. Me tomaba unas pastillas, de las que salió Óscar Valdez (positivo), que son para bajar de peso, yo no uso otra cosa», explicó el pugilista en su cuenta de Instagram.
«Cuando me metieron (a la clínica) dijeron que nadie tenía que ver y tuve que salir solo, me abandonaron ahí para aprovechar. Ella no trabaja, gracias a Dios le he podido dar todo y ahora que estoy como ella quería que estuviera… hay cosas que no están bien. Lo que no me gusta es que a los niños no los cuiden sus mamás, mis hijos tienen niñeras, pero la idea es que ella los cuide», añadió.
Con información de Medio Tiempo