Emma Coronel podría librar la cadena perpetua y confía en lograr la sentencia más baja posible


Pese a los tres cargos de narcotráfico que se le imputan, la ex reina de podría salir ilesa

El pasado 10 de junio Emma Coronel optó por un camino ya muy recorrido por muchos narcotraficantes: se declaró culpable de conspiración por tráfico de drogas y de lavado de dinero. Pero esta declaración le habría dado la oportunidad de salir ilesa.

Tras un largo estira y afloja con los fiscales en Estados Unidos, la esposa de Joaquín el Chapo Guzmán, firmó aquel día un documento que la hacían responsable de tres delitos relacionados con el narcotráfico.

La periodista Laura Ley explica que este movimiento le permitirá no correr con la misma suerte que Guzmán Loera, quien enfrenta una sentencia de cadena perpetua en una cárcel de Colorado.

Tal vez , con un aire de inocencia, la ex reina de belleza confía en lograr que su sentencia sea la más baja posible. El próximo 15 de septiembre se dará lectura de la condena que podría enfrentar Coronel.

Además de asegurarse un futuro, podría evitar un pleito intestino en el Cártel de Sinaloa, debido a que evito un juicio en el que podrían salir varios nombres de peso pesado.

Los expertos advierten que lejos de lo que se cree, la declaración de Emma podría situarla como la principal ganadora de la historia criminal del Cártel de Sinaloa, pues su condena podría reducirse: sería libre, millonaria y tendría una vejez despreocupada, contrario a sus conocidos del grupo criminal sinaloense.

La defensa de Emma asegura que su clienta teme por su vida y la de sus gemelas, tras la difusión de la noticia sobre que se entregó a la justicia para ser testigo cooperante.

Coronel conoció al fundador del Cártel de Sinaloa en una fiesta de rancho. Según Estados Unidos, ella coordinaba la parte más importante de la sobrevivencia del capo: sus escapes.

La también ex reina de belleza supo capitalizar la fama generada en torno a su imagen, impulsando una marca de ropa con el nombre de su marido, y llegó a participar en un reality show en Estados Unidos, donde coincidió con otros herederos del imperio de la droga. Algunos de ellos hijos o sobrinos del narcotráfico colombiano o mexicano.