‘Es una de las herencias que me dejaron esas armas’, afirmó el gobernador, al señalar que él ordenó esculque y se ocultaron detalles para evitar apología del delito


El mandatario, indicó que él pidió que se omitieran las imágenes del «Chapo Guzmán» que estaban en algunas de las armas aseguradas y tampoco se informó sobre la celda lujosa, porque además que hacen apología del delito, también se evitó para no entorpecer la investigación que están realizando las autoridades federales

Culiacán, Sinaloa.- “Es una de las herencias que me dejaron esas armas que estaban ahí en el penal”, afirmó el gobernador del estado, Rubén Rocha Moya, esto luego de que la mañana del pasado viernes, se realizara de manera sorpresiva un esculque en el centro penitenciario de Aguaruto, dando como resultado el aseguramiento de un arsenal, más de un millón de pesos en efectivo, gallos de pelea, drogas y entre otros objetos ilícitos.


El mandatario sinaloense, dijo que si él no hubiera instruido al secretario de seguridad pública del estado, Cristóbal Castañeda Camarillo, que realizara ese operativo de manera sorpresiva al interior del penal, no se hubiera evidenciado todo lo que tenían los internos y la evidente corrupción que existe, pero ya con esto, dijo, se empezará a corregir un poco la situación de los penales.


Rocha Moya, dijo que obviamente ellos no sabían que los internos del penal de Culiacán contaban con todo ese arsenal y equipo táctico, con lo que dijo es suficiente para que se desate un enfrentamiento, lo que “sería demasiado escandaloso”, y el hallazgo fue meramente por circunstancial porque los gallos habían removido la tierra.


Recalcó que dicho operativo se desplegó derivado de los hechos suscitados hace unas semanas cuando fue asesinado el detenido por el feminicidio de la niña Alma Delia, y como ya se sabe desde hace mucho, siempre tienen cosas ilícitas al interior, sin embargo hoy fue demasiado lo que se encontró.


Al ser cuestionado sobre el hecho de que se encontró una celda más lujosa de las que años anteriores se habían encontrado en el penal de Aguaruto y no se dio a conocer por parte de la SSPE, justificó que él mismo le pidió al secretario de seguridad que no se dieran a conocer detalles, como el hecho de que las armas contaban con cachas decoradas con el rostro del “Chapo Guzmán”, esto para evitar apología del delito, aunado a que se encuentran en medio de una investigación.