Llegan a Culiacán otros 200 elementos de élite de Fuerzas Especiales y Fusileros Paracaidistas del Ejército Mexicano


Culiacán, Sinaloa.- La Secretaría de la Defensa Nacional a través de las Comandancias de la III Región Militar y 9/a. Zona Militar, hacen del conocimiento que en el marco de la Estrategia Nacional de Seguridad Pública y de la política de cero impunidad del gobierno federal y con trabajos de inteligencia, la mañana de este domingo 28 de julio, fueron desplegados 200 militares del Cuerpo de Fuerzas Especiales y de la Brigada de Fusileros Paracaidistas del Ejército Mexicano en Culiacán, con el fin de reforzar el actual despliegue operativo que se mantiene en ese municipio.

Los efectivos castrenses arribaron al Aeropuerto Internacional de Culiacán, en dos aeronaves, una de la Guardia Nacional y otra de la Fuerza Aérea Mexicana, con el fin de contribuir a inhibir las actividades ilícitas de grupos delictivos con presencia en citada entidad federativa, así como preservar y garantizar la libertad, el orden y la paz pública de los habitantes de esta región.

Las unidades de Fuerzas Especiales y Fusileros Paracaidistas se caracterizan por su rapidez, movilidad, capacidad de despliegue y reacción que les permite generar y explotar con eficacia productos de inteligencia, contando con gran variedad de armamento, material, equipo, aeronaves y adiestramiento especializado para operar en cualquier ambiente geográfico.

Es preciso señalar que el personal militar actuará en todo momento con firmeza, realizando tareas de disuasión, prevención, patrullajes, reconocimientos y estableciendo puestos militares de seguridad que generen un ambiente de tranquilidad en la población, apegándose a lo establecido en la Ley Nacional Sobre el Uso de la Fuerza y respetando en todo momento los derechos humanos.

De esta manera, el Ejército, Fuerza Aérea y Guardia Nacional reafirman la indeclinable decisión del gobierno federal por prevenir las actividades de la delincuencia organizada, refrendando su compromiso de velar y salvaguardar la paz y seguridad de la población y sus bienes.