Culiacán, Sin.- Dos de los reporteros gráficos del periódico Noroeste denunciaron en la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) las agresiones de las que fueron víctima por parte de policías de diversas corporaciones en la manifestación a favor del capo sinaloense Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Uno de los fotógrafos de este medio aseguró que agentes de la Policía Ministerial del Estado (PME) le quebraron el equipo y trataron de asfixiarlo al momento en que registraba los aspectos de manifestantes en el municipio de Salvador Alvarado.
El denunciante de quien por temor se reserva su identidad, dijo que los uniformados de la PME le dijeron que si seguía tomando fotografías lo levantarían y lo iban a desaparecer.
Los agentes lo golpearon en el estómago, pierna y le dieron una cachetada por tomar fotografías además aseguró que el comandante de la partida del municipio de Angostura, Florentino López Ibarra, sabe muy bien quienes fueron los policías que lo golpearon porque él estaba al mando del operativo.
“Observo de que la patrulla que iba adelante la 2250 o 2148 o 2184 no recuerdo exactamente de ministeriales se bajan corriendo a querer detener a uno de los manifestantes yo en eso estaba retirado empiezo a tomar fotos cuando lo llevan a la patrulla al muchacho no sé porque lo llevaban detenido desconozco las causas ven que yo le estoy tomando fotos y se van contra mí, lega un ministerial me agarra por el cuello me estaba ahorcando”.
Otro de los afectados señaló que ese mismo día pero en Culiacán realizaba su trabajo cuando policías a los que no identifico porque tenían cubierto el rostro también le quitaron su equipo al mismo tiempo en que lo agredían a golpes.
El reportero gráfico quien omitió su nombre enfatizó que los uniformados le robaron la cámara, flash y los lentes para este dispositivo los cuales son bastante costosos.
Los policías le “decomisaron” el equipo cuando fotografiaba los casquillos esparcidos en la calle debido a los disparos que efectuaron los uniformados para tratar de someter a los manifestantes.
“Me estaban amenazando de que me iban a matar de que me iban a llevar que pinche chilango etcétera y en ese momento sacaron una bolsa grande de una camioneta, acto seguido llega un municipal y me levanta de esa bola y me aleja para que vienes a trabajar acá aquí no está López Obrador aquí si golpeamos a los periodistas etcétera cosas de ese tipo”.
Ambos fotógrafos temen por su seguridad personal debido a que los uniformados pueden tomar venganza.
Geovanny Elizalde /ExtraOficial