FARSA COSUMADA


Entrelíneas por Eduardo Valdez Verde

Sin gritos, sin aspavientos, sin alguien que al menos levantara la mano  la voz para inconformarse, ayer quedó consumada la farsa disfrazada de elección en el PRI estatal.

“Proceso” planchado de antemano, ceo arrugas. Ya venía todo listo desde la convocatoria y el registro de Martha Tamayo y Jesús Valdés fue una actuación de la peor calidad. Guión preestablecido en el que ni los mismos actores creen.

“Al haber un solo registro, la Comisión Estatal de Procesos Internos, declaró válida la elección de Martha Sofía Tamayo Morales y Jesús Valdés Palazuelos, para encabezar la dirigencia del Comité Directivo Estatal del PRI”, señala un escueto comunicado enviado ayer por la dirigencia de ese partido. Claro, tenían que ser ellos los elegidos, no había más, Cero competencia interna.

En pro de la llamada “unidad partidaria”, priístas de la vieja y de la nueva guardia prefieren no moverse de sus sillas, no arriesgar su zona de confort ni reclamar lo que ya venía palomeando desde del centro del país.

No se cuestiona el hecho de que una mujer a dirigir este partido, sino la forma tan burda y alineada en la que se lleva a cabo una supuesta elección con una planilla única.

La democracia que se pregona y se exige hacia afuera, no la tiene el PRI al interior, donde se habla de renovación, pero se llevan a cabo las mismas prácticas de hace 30 ó 40 años.

LIBRETA DE APUNTES

EL HOMICIDIO de la joven dora Michelle Ibarra Yáñez, cometido el lunes, ha conmocionado no sólo a sus familiares y sus amigos, sino al Conalep, institución de donde era estudiante.

Se asegura que el ataque fue directo contra ella y que hay pistas firmes para dar con el o los homicidas.

Es esta joven de 17 años la mujer número 22 que ha sido asesinada de forma violenta en Sinaloa en lo que va del año, una cifra que deja muy mal parada a la entidad a nivel nacional.

SI EN ALGO se puede coincidir con las autoridades municipales y estatales, es en el hecho de que las obras viales realizadas en los últimos dos años le han cambiado la imagen a la capital del estado.

Efectivamente, los tres pasos deprimidos que se han abierto en puntos estratégicos de la ciudad, han venido a agilizar el tráfico en zonas hasta hace poco convertidas en cuellos de botella. Los puntos buenos, dicen, no hay que quitárselos a nadie. Estas y otras obras son esos “puntos buenos” que tienen tanto el alcalde de Culiacán como el gobernador.