Afirma que un compañero solidario fue quien pagó su fianza de 10 mil pesos
Culiacán, Sin.- Luego de que pagaran su fianza de alrededor de 10 mil pesos, el jueves por la tarde Miguel Ángel García Leyva se instaló en el kiosco de catedral en la plazuela rosales y este viernes anunció su regreso al Ayuntamiento de Culiacán para continuar con la huelga de hambre.
Comentó que tras ser detenido por policías municipales, cuando se encontraba en el campamento instalado a las afueras del palacio municipal, fue llevado al tribunal de barandillas con agresiones, lo que le dejó varias lesiones en su cuerpo.
Tras las rejas todavía se encontraban 17 hombres y seis mujeres, mientras que afirmó que su fianza la pagó una persona solidaria, descartando que se tratara del dirigente del PAS, Héctor Melésio Cuén Ojeda.
Acusó que los cinchos fueron apretados en sus muñecas con violencia, además de que las heridas que estos provocaron se infectaron. El huelguista aseveró que fue golpeado en el estómago y policías se subieron sobre él pisoteándolo.
“Allá en las celdas que nos tenían, si se dan cuenta se me infectaron las heridas, traigo todas las heridas infectadas, yo soy diabético, cuando me llevaron les dije que no me pusieron los cinchos, excesivamente me pusieron los cinchos de plástico y aun así me los apretaban más, traía las pisadas de los policías, se subieron arriba de mí, me golpearon”, comentó.
García Leyva indicó que al llegar a la dirección de seguridad pública, los agentes policiacos se robaron todo lo que habían decomisado durante el desalojo de los pepenadores, entre computadoras, documentos y productos de uso personal.
Francisco Morales /ExtraOficial