Entrelíneas por Eduardo Valdez Verde
El arranque de una campaña no es determinante para definir el rumbo de la misma, pero sí un termómetro para medir los ánimos, la organización y las ganas de los candidatos. EI inicio de una campaña sirve para que los contrincantes, midan fuerzas y capacidades.
Es como el boxeo, el primer round es de «estudio» para darnos la idea de cómo vienen los dos que están arriba del ring.
Así pues, si lo que se vio la madrugada de este miércoles en los respectivos arranques de campaña de los candidatos a la alcaldía de Culiacán, Sergio Torres (PRI) y Eduardo Ortiz (PAN), marcará el resto de la contienda, se puede deducir que el empuje estuvo de parte del primero incluso hasta en la elección del lugar para llevar a cabo el primer acto ya como candidatos en plena carrera.
Sergio Torres y Eduardo Ortiz iniciaron a las 00:01 horas del miércoles, es decir, en el primer minuto del día para no desperdiciar un tiempo que debe aprovecharse al máximo. Torres eligió la avenida Obregón, entre Escobedo y Juárez, justo frente a Palacio Municipal. Ortiz, por su parte, eligió como punto de arranque el cruce de Madero y Aquiles Serdán, un punto que como referente no significa nada para la ciudad.
Cierto que ahí tiene su casa de campaña (en un banco y una gasolinería), pero tal parece que la ubicación se la eligió su peor enemigo. ¿Por qué no elegir Obregón y Ciudades Hermanas, al pie de La Lomita? O bien, el asta bandera en el Tres Ríos o frente a Catedral.
Vaya, de pérdida la sede del PAN estatal o el cruce de Madero y Obregón para medir fuerzas con su contrincante. No, nada de eso, el acto de inicio de Ortiz fue en un crucero escondido, con muy poca iluminación.
Mientras Sergio Torres cerró la Obregón con un tráiler que sirvió de plataforma y a la vez desplego un enorme espectacular con su imagen y la de su familia, Ortiz colocó un templete can Una modesta manta.
Mientras el equipo de Torres echó a andar al menos 15 camionetas con anuncios luminosos y se apoderó de los espectaculares del primer cuadro de la ciudad, Ortiz soltó a la calle una veintena de folclóricos triciclos equipados para el perifoneo.
Mientras el equipo de Sergio Torres repartía cientos de camisetas, gorras y banderines, en el mitin de Eduardo Ortiz solo sus brigadistas traían camisetas y gorras.
Pueden parecer detalles menores, pero tratándose de una campaña electoral de solo un mes de duración, la percepción y la imagen son de mucho pero, así es que sobre la marcha el ex secretario de Desarrollo Económico tendrá que pisar el acelerador a fondo e inyectarse adrenalina, porque lo que se vio ayer en su arranque de campaña, no pinta nada bien.
LIBRETA DE APUNTES. «VENTE, GUERO, TE OCUPO»
Eso fue lo primero que Ie dijo Sergio Torres a David Alarid, dirigente del Stasac, minutos antes de iniciar su campaña. Llegó, lo abrazo y paso con él para la foto. Fue de los primeros a los que el candidato ubicó en la Obregón, frente a Palacio Municipal. Sergio Torres, que fue dirigente del Stasac, sabe lo que significan los 3 mil 200 agremiados activos y los 200 jubilados con que cuenta ese sindicato. Claro que ocupa de su lado al «Güero» Alarid.
SE BAJA DEL TREN
Quien fuera aspirante a la alcaldía de Angostura por el PRI, Alejandro Rivera Montoya, ayer de plano tiró la toalla. No se han precisado los motivos para que deje la candidatura, pero existen rumores diversos. Desde el hecho de que en el PRI no Ie cumplieron lo prometido y Ie jugaron chueco, hasta supuestas amenazas de parte del crimen organizado en esa zona que tanto se ha calentado en los últimos meses. Podría entrar al quite Óscar Bojórquez, dirigente del Comité Municipal del PRI en ese municipio.