Culiacán, Sinaloa.- Para continuar celebrando el 491 aniversario de la capital sinaloense, se presentó con éxito la conferencia titulada ‘Culiacán: El Dilema del Nombre’, misma que estuvo a cargo del cronista de la ciudad, Francisco Padilla.
La charla giró en torno al origen y la evolución de la toponimia de Culiacán, pues existen diversas contradicciones, teorías y polémicas respecto a su creación y la permanencia de su significado hasta nuestros días.
El cronista comenzó desde la caída de Tenochtitlan, pasando por la pregunta, ¿dónde estaba situado exactamente Culiacán?, asimismo, planteó como primera hipótesis que los pobladores iniciales, solo permanecieron durante tres años en este territorio, esto entre otros planteamientos polémicos que bien suponen un debate.
En continuidad con lo anterior, la charla repasó los diversos significados que han presentado escritores tales como: Eustaquio Buelna, quien define a Culiacán como “Lugar donde los caminos se tuercen”, definición que más tarde reafirma el escritor Manuel Bonilla.
Por su parte, Jesús Lazcano y Héctor R. Olea, proponen el significado como “Los que tienen al Dios Coltzin o Dios Torcido”, “El sabio Culiacán”, o bien, “El legendario Culiacán”.
De igual forma, el maestro Antonio Nakayama establece en sus escritos que pudiera considerarse como otra opción válida “Lugar de Culebras”; todos ellos, entre muchos otros historiadores tanto nacionales como extranjeros, quienes basándose en hallazgos posteriores a sus antecesores, continúan encontrando pruebas de que la historia no es absoluta.