Culiacán, Sin.- La Unidad Especializada en Aprehensiones (UNESA) realizó la captura de dos mujeres vecinas de esta ciudad capital quienes están acusadas de ser probables responsables del delito de fraude genérico.
Información de la Procuraduría General de Justicia del Estado revela que Imelda Bátiz Salcido y su hija Guadalupe del Socorro Yañez Bátiz, son propietarias de la empresa Nueva Comercializadora Bátiz, con residencia en la ciudad de Culiacán, cuyo giro son mariscos.
La información relata que la afectada es Susana Retamoza Machado, con domicilio en la ciudad de Culiacán. La averiguación previa al respecto señala que Retamoza Machado y la familia Yañez Bátiz sostenían relación de amistad y que fue invitada a invertir en el negocio de compra venta de mariscos, en sus modalidades de importar y exportar.
Aceptó y aportó importante suma de dinero para la adquisición de un embarque de calamar que sería adquirida a la empresa CETUS, con oficinas centrales en la república de Perú.
El embarque de dicho producto no llegó y Susana Retamoza Machado visualizó que su inversión estaba afectada por lo que llamó telefónicamente a la compañía CETUS y la respuesta fue que a su nombre, ni a nombre de la Nueva Comercializadora Bátiz, había pedido alguno por entregar.
Retamoza Machado acusó legalmente a Imelda Bátiz Salcido y a Guadalupe del Socorro Yañez Bátiz, por lo que la autoridad judicial obsequió las órdenes de aprehensión en contra de las dos mujeres, las cuales fueron cumplimentadas por la UNESA.
Ambas indiciadas fueron internadas en el centro de Ejecución de las Consecuencias Jurídicas del Delito y puestas a disposición del tribunal judicial que tiene a su cargo la causa penal correspondiente.
Redacción /ExtraOficial